miércoles, 14 de enero de 2009
Dar de Corazón
Hubo una vez un mendigo, que estaba tendido al lado de la calle.
Vió a lo lejos venir al Rey, con su Corona y Capa.
Pensó: Le voy a pedir, y seguramente me dará bastante.
Cuando el Rey pasó cerca, le dijo:
-Su Majestad, ¿Me podría, por favor, regalar una moneda?
Aunque en su interior pensaba que el Rey le iba a dar mucho más.
El Rey lo miró y le dijo:
-¿Por qué no me das algo tú? ¿Acaso no soy tu Rey?.
El mendigo no sabía que responder a la pregunta, y dijo:
-Pero Su Majestad, ¡YO NO TENGO NADA!.
El Rey respondió:
-Algo debes de tener. ¡BUSCA!
Entre su asombro y enojo el mendigo buscó entre sus cosas, y supo que tenía una naranja, un pedazo de pan, y unos granos de arroz. Pensó que el pedazo de pan y la naranja eran mucho, así que sólo tomó 5 granos de arroz y se los dio al Rey.
Complacido, el Rey dijo:
-¡VES COMO SÍ TENIAS!. Y le regaló 5 Monedas de Oro: una por cada grano de arroz.
El Mendigo dijo entonces:
-Su Majestad, creo que acá tengo otras cosas
Pero el rey no le hizo caso y dijo:
-Solamente de lo que me has dado de corazón, te puedo Yo dar.
Tomado de Reflexiones Diarias
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